El salto a la sostenibilidad medioambiental empieza en la base. Que los vehículos actuales emiten cada vez menos CO2, o no emitan en caso de los eléctricos, solo es el final de un proceso de I+D y fabricación que también deben limpiarse. Así lo sostiene Audi, que ha apostado por que todas sus plantas de producción sean neutras en carbono llegado el 2025 y, a largo plazo, consiga un balance ambiental neutro.

Todas estas acciones se ven enmarcadas en su plan ‘Mission:Zero’, el objetivo del cual es alcanzar la neutralidad en carbono en la producción de sus vehículos, pero también en cualquier proceso externalizado a terceros.

'Mission: Zero' de Audi es un proyecto prionero

“Una proporción importante de las emisiones en el ciclo de vida de un automóvil se genera durante su fase de utilización. Sin embargo, debido a la creciente proporción de vehículos electrificados, estas emisiones pasan cada vez más a la fabricación”, sostiene el responsable de Producción y Logística de la marca alemana, Pete Kössler.

Se trata de un punto clave, en opinión de Kössler. Observa en la intención de lograr la neutralidad en carbono una “palanca decisiva” a mano de las grandes compañías para que se disminuyan las emisiones de dióxido de carbono (CO2).

Dos plantas de producciòn de Audi ya tienen el reconocimiento sostenible

En plena carrera por conseguir el objetivo, dos de las fábricas de Audi, ubicadas en Bruselas y Gyor (Hungría), ya cuentan con el reconocimiento, los equipamientos y los procesos que permiten producir dentro de los nuevos estándares medioambientales y que tienen la energía solar como uno de los recursos principales.

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