Ventajas y desventajas de los coches de Hidrógeno

Ventajas y desventajas de los coches de Hidrógeno

1130 Visitas

Con la evolución de las tecnologías del mundo del automóvil surgen nuevas motorizaciones innovadoras, hechas para reducir las emisiones y hacer los vehículos menos contaminantes. Ya son muy conocidas opciones como los híbridos o los eléctricos, sin embargo, existe otro tipo de motor que empieza a ver la luz.

Estamos hablando de los coches de hidrógeno, unos vehículos revolucionarios que buscan competir con los eléctricos en el mismo mercado, e intentan imponerse como la mejor opción dentro de "los coches del futuro". Si ya conoces los eléctricos y sus ventajas, este artículo te va a servir de comparativo. Pero si no tienes claras las características de estos modelos, entra en nuestro artículo sobre si merece la pena un coche eléctrico y descúbrelas.

¿Como funcionan los coches de hidrógeno?

Se basan en aprovechar el hidrógeno para producir electricidad, usando una reacción química que solo libera vapor de agua y calor, haciendo que sea un modelo cero emisiones y por tanto totalmente sostenible. La electricidad que se produce se traslada a una batería donde se almacena, para asegurar que el motor no se queda sin combustible. El vehículo cuenta además con uno o más motores eléctricos para su movimiento junto con el tanque que almacena el propio hidrógeno.

Al ser un elemento casi inagotable y muy presente en todo momento, además de tener un rendimiento energético considerable, el hidrógeno puede utilizarse sin problemas, y aún dispone de muchas opciones para seguir siendo refinado y perfeccionado como combustible. Esto lo convierte en un proyecto de futuro con muchas posibilidades para luchar contra el petróleo y sus derivados, a la vez que un posible sustituyente de los modelos eléctricos.

Cabe remarcar que esta modalidad aún se encuentra en el inicio de su desarrollo, si bien las previsiones calculan que en unos 10 años se alcanzaran los 150.000 coches de este tipo en España. En algunos países ya se considera el futuro de la automoción, como es el caso de Japón, aunque hay otros que aún creen que es temprano para apostar por ellos y esperan a mayores avances.

Honda Clarity Hidrógeno

Con esta introducción a su funcionamiento, vamos a ver ahora sus ventajas e inconvenientes, que generalmente se comparan con los eléctricos convencionales, debido a sus similitudes y competencia natural entre ellos.

Ventajas de un coche de hidrógeno

1- No emite ninguna sustancia nociva

Solo liberan vapor de agua durante la conducción, de manera que no hay gases tóxicos, contribuyendo así al cuidado del medio ambiente y a la reducción de los niveles de contaminación que producen los transportes con carburantes. Esto permite adelantarse a las normativas medioambientales del futuro, así como a las restricciones impuestas por Europa; un 35% menos de emisiones para el año 2030.

Eso no es todo, pues pueden disfrutar de la etiqueta CERO emisiones de la DGT, consiguiendo así los beneficios asociados a ésta, al igual que tienen los eléctricos. Algunos ejemplos serían el no ser afectado por las restricciones de circulación en zonas con alto nivel de contaminación, como son las grandes ciudades, y poder evitar pagar para aparcar en algunas zonas especiales y zonas exclusivas.

2- Tarda entre 3 y 5 minutos en repostar

Otra de las grandes ventajas de estos modelos, y una de las más destacables, es el tiempo de repostaje. No supera los 5 minutos, algo muy remarcable debido a la diferencia con los eléctricos, que requieren un mínimo de 30 minutos en los puestos de recarga más rápidos. Esta gran diferencia los sitúa al mismo nivel que los coches de gasolina o diésel, con los que necesitas aproximadamente el mismo tiempo para repostar. Asimismo, el gasto tampoco es muy diferente, con un precio estimado del hidrógeno parecido a la gasolina.

A esto hay que añadir su autonomía, muy considerable para estar en sus inicios. Éstos llegan a doblar los niveles de autonomía actual de los coches 100% eléctricos, alcanzando los números de algunos coches convencionales.

3- El mantenimiento del motor es mínimo

Una ventaja que suele pasar desapercibida tiene relación con el mantenimiento. Y es que el hidrógeno es limpio no solo respeto a las emisiones, sino también durante su uso, haciendo que el desgaste sea mínimo. Juntando esta información junto con un motor sencillo, se consigue un mantenimiento reducido que puede minimizar los gastos en el vehículo.

Y para terminar con sus ventajas, un par de puntos extra a favor de estos modelos; el silencio de los coches es igual al de los eléctricos, siendo casi insonoros. También están más preparados para temperaturas extremas, en las que no se notan prácticamente cambios en sus prestaciones y capacidades, algo que sí puede afectar a los coches eléctricos.

Ahora que ya conoces todas las ventajas, vamos a comentar algunos de los puntos negativos que hay que destacar de los vehículos de hidrógeno, pues como toda motorización, no es perfecta.

Desventajas de un coche de hidrógeno

1- El precio de compra

Lo primero de todo, el precio. Y es que si los eléctricos resultan caros, los de hidrógeno tienen precios aún más elevados. Su coste de fabricación es alto todavía, y la tecnología de hidrógeno resulta cara en sí misma, así que los precios finales también lo son por consecuencia.

2- Hay pocos lugares para repostar

La segunda gran desventaja tiene relación con el repostaje. La realidad es que hay muy pocos lugares donde estos coches puedan llenar su tanque de hidrógeno; de hecho en España actualmente solo hay 6 puntos habilitados. Estos sitios, de manera coloquial conocidos como “Hidrogeneras”, están aún lejos de ser habituales en las carreteras, si bien hay países apostando fuertemente por ellas. Un gran ejemplo es Alemania, que planea alcanzar las 500 durante la década. En España, din embargo, aún hay bastante incertidumbre respeto la apertura de nuevos hidrogeneras.

3- Poca variedad de modelos

El siguiente punto negativo es la limitación de modelos, que ahora mismo es muy palpable. Los fabricantes aún son reticentes a producir modelos en gran escala, en parte por lo mencionado anteriormente: la falta de hidrogeneras. Esto crea un efecto en cadena, haciendo los precios altos, las condiciones malas, baja demanda, y con eso se llega otra vez a la poca fabricación.

Y para terminar las desventajas, mencionar la vida útil de algunas partes que contienen estos coches, pues tienen una vida limitada. Por ahora, este límite se establece a los tanques de hidrógeno en 15 años, además de que se puede notar una disminución del rendimiento de las pilas en un 15% tras los 250.000 km. Además de esto, el propio hidrógeno destaca por ser inflamable, un riesgo que destaca como potencial peligro. Esto puede asustar a algunas personas, pero en su fabricación se toman medidas que minimizan los riesgos y están muy aseguradas, pues interesa garantizar la seguridad y la sensación de poca peligrosidad.

Tras todas estas ventajas y desventajas, la conclusión es clara. Los coches de hidrógeno prometen mucho, con grandes innovaciones y posibilidades por explorar. Sin embargo, parece que aún es temprano para optar por ellos, por sus limitaciones actuales en diferentes ámbitos. Eso si, conviene mantener la atención puesta en como evolucionan, pues rápidamente pueden convertirse en los modelos más aptos para el futuro.

Así pues, por ahora puedes optar por alguno de nuestros vehículos de renting al mejor precio, entrando en nuestra web de M Renting, donde encontrarás las mejores ofertas de renting todo tipo de motorizaciones. Nos ajustamos al tu tipo de perfil, ya sea autónomo, particular o empresa.

Publicado en: Modelos de coche